lunes, 10 de septiembre de 2007

Mi día

Hoy me he levantado con dolor de cabeza. La noche pasada por agua no me ha ayudado precisamente a dormir. A pesar de haberme llevado tu olor en mi piel, que pensé que actuaría como bálsamo para descansar, lo cierto es que mi despertar ha sido muchísimo peor de lo que me imaginaba.
El día ha transcurrido pensando lo justo, que ayer ya pensé todo lo que debía y hoy ha tocado simplemente dejarme llevar por cinco horas de teoría y por otras tantas horas de arrastrarme por la ciudad, de punta a punta.
La cabeza parece que me va a explotar, la presión parece que va a hacer que la frente me salte en pedazos en cualquier momento de la noche. Sólo espero que no llueva, y que no truene, que haga fresquito y que pueda dormir, porque mañana tengo más de pensar lo justo y de dejarme llevar y esta noche duermo acompañada, aunque no de quien más me apetece. La compañía tampoco es mala, mi prima, pero siempre se puede mejorar.

2 comentarios:

Cvalda dijo...

Esas noches son una mierda, hacen que los días se vuelvan cansinos...verás como duermes mejor, aunque con la compañía de tu prima no sé yo (seguro que estais de chachara :P)

Mathieu Saladin dijo...

Oye, pobre prima...